La primera actividad fue una visita guiada de 32 niñas, niños y jóvenes al oasis de niebla “Alto Patache”.
Con una visita a la Estación Alto Patache, para conocer el oasis de niebla ubicado en el
sector, comenzó la iniciativa “Proyecto de Ciencias y Arte: Reconociendo la Biodiversidad
de Tarapacá”, realizada gracias a un convenio entre la Seremi de las Culturas, las Artes y
el Patrimonio, a través de su centro Cecrea y Explora Tarapacá.
Se trata de un proyecto realizado entre ambas instituciones que tendrá ocho meses de
duración que permitirá la entrega de contenidos y el desarrollo de experiencias para
niños, niñas y jóvenes, desde el área de las ciencias; en convergencia con las artes, la
sustentabilidad y las tecnologías, permitiendo ampliar el conocimiento y nuevas
posibilidades de reflexión y creación artística.
En la primera actividad del convenio, la visita a la Estación Atacama UC, centro
meteorológico ubicado en la cordillera de la costa en el sector de Alto Patache, contó con
la presencia de 32 niñas, niños y jóvenes pertenecientes a establecimientos
educacionales de la región, quienes pudieron conocer el Oasis de Niebla de Alto Patache,
el cual está localizado en la cordillera de la Costa, en pleno Desierto de Atacama, a 70
kilómetros al sur de Iquique.
“Hemos firmado un convenio con Explora, que posibilita generar este tipo de iniciativas
que vinculan las artes, el patrimonio y la ciencia. Esto permitió que alumnos pudieran ser
parte de esta experiencia única que ofrece nuestra región, en medio del desierto más
árido del mundo. El año pasado otro de estos oasis, el de Punta Gruesa, fue declarado
Santuario de la Naturaleza y nuestro interés es avanzar en la protección y puesta en valor
de estas zonas ubicadas en nuestra región”, precisó la seremi de las Culturas, las Artes y
el Patrimonio, Rose-Marie Acuña.
Durante la jornada, profesionales y expertos entregaron información detallada sobre la
forma en que aparecen este tipo de oasis, donde la influencia de la niebla costera permite
el desarrollo de vegetación especialmente adaptada, que provee hábitat para diversas
especies animales.
“Es muy interesante saber la cantidad de agua que pueden absorber estos atrapanieblas,
me sorprendió que el 2% de la neblina sean más de 300 litros de agua. También aprendí
sobre los líquenes un híbrido entre hongo y planta que habita en el desierto”, expresó por
su parte, Lucas Retamal, estudiante del Liceo Metodista Robert Johnson.
Se espera que durante los próximos meses se puedan organizar nuevas experiencias, de
la mano de este convenio, en un proceso que tendrá salidas pedagógicas, visitas a
terreno y actividades en estaciones de trabajo, donde algunos de los temas a tratar será
la exposición en terreno de fósiles, conocer sistemas de reciclaje y el uso de material en
desuso en obras artísticas, lo que concluirá con un documental que recopilará todas las
experiencias.