El Centro de Investigación para la Educación Inclusiva de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (EduInclusiva PUCV) desarrolló en Alto Hospicio una jornada de reflexión enfocada en la convivencia escolar y el buen vivir. La actividad, organizada junto a la red local de establecimientos educacionales, contó con la participación de diversas comunidades escolares de la comuna.
Al encuentro asistieron representantes del Colegio Metodista Robert Johnson —coorganizador de la jornada—, Liceo Bicentenario Metodista William Taylor, Liceo Bicentenario Nirvana, Liceo Bicentenario Kronos, Colegio Salesiano Santo Domingo Savio y Colegio Monte Carmelo. También se sumaron profesionales de la Secretaría Regional Ministerial de Educación de Tarapacá y de la Municipalidad de Alto Hospicio, fortaleciendo el trabajo conjunto entre instituciones educativas, académicas y públicas.
Durante la actividad, el equipo de la línea de Convivencia Escolar de EduInclusiva presentó resultados recientes sobre la percepción de la violencia en el sistema educativo chileno y los principales desafíos que enfrentan los liceos al abordar esta problemática. Posteriormente, se realizó un taller participativo orientado a reconocer prácticas efectivas dentro de las escuelas, mediante un ejercicio de reflexión intergeneracional entre estudiantes, apoderados, docentes, equipos de convivencia y profesionales.
La jefa provincial del Departamento de Educación de Iquique, Carmen Aurora Barrera Hennings, destacó el valor del trabajo colaborativo: “Este es un desafío que debemos asumir entre todos. Como Ministerio estamos disponibles para apoyar a las comunidades en la búsqueda de soluciones, porque nuestro objetivo común es que niños, niñas y jóvenes aprendan en espacios seguros”.
Desde EduInclusiva, el investigador Francisco Leal valoró la profundidad del diálogo generado: “Ha sido una conversación intergeneracional e interestamental que permitió reconocer logros y desafíos. En un territorio complejo como Alto Hospicio, este ejercicio facilita mirar la convivencia con mayor optimismo y fortalecer la red escolar. Como centro, seguiremos apoyando estos espacios”.
Por su parte, la investigadora Karen Cárdenas resaltó el valor formativo del taller, señalando que permitió analizar las prácticas desde el aula hasta la relación con el entorno, promoviendo el reconocimiento de acciones positivas dentro de cada comunidad. En la misma línea, la investigadora Macarena Morales subrayó la importancia de devolver a las escuelas los resultados de las investigaciones realizadas, destacando la presentación de una investigación de diez años sobre trayectorias de convivencia y violencia escolar.
La jornada finalizó con un espacio de análisis colectivo que permitió proyectar nuevas acciones y consolidar aprendizajes, reafirmando el compromiso de construir una convivencia escolar democrática, inclusiva y acorde a la realidad del territorio de Alto Hospicio.


